El controvertido reality show “Gran Hermano” continúa siendo el epicentro de escándalos que sacuden tanto a Telefe como a Paramount. La cadena, en particular, se encuentra en el ojo del huracán debido a las numerosas denuncias que ha recibido respecto a los comportamientos agresivos de Furia Scaglione.
Sin lugar a dudas, el epicentro de las controversias en “Gran Hermano” tiene nombre y apellido: Juliana “Furia” Scaglione. Su constante generación de escándalos ha dejado al canal y a la producción en una posición comprometida, suscitando la indignación del público por la falta de medidas disciplinarias.
El conductor del programa nocturno de América TV se animó a contar cómo la producción del programa más seguido en Argentina comunica información a los participantes. Esta revelación desató una ola de críticas en las redes sociales, donde los espectadores exigieron transparencia en el proceso.
La estrategia de comunicación de la producción de Gran Hermano, al descubierto
Según De Brito, Furia Scaglione tiene acceso al programa desde dentro de la casa, aunque no precisó cómo. “Furia mira ‘LAM’ dentro de la casa, no sé si escucha por las paredes o debajo de las plantas, pero sabe que el ex de Fernanda -Iglesias- anda con Cata. ¿Cómo corno puede saberlo? Furia intuye que pueden entrar los ex, que el marido de Fernando está tiroteando con Cata. Sabe cuántas veces al baño va Laura Ubfal por día, desde adentro”, reveló el periodista.
Además, De Brito compartió testimonios de ex participantes de “Gran Hermano” que detallaron cómo la producción se comunica con ellos desde el exterior. “Los chicos de GH nos contaban que veían a los camarógrafos o a un productor que estaban afuera. Acá me cuenta un ex GH sobre los camarógrafos ‘nosotros hablábamos con los camarógrafos a la noche. Nos golpeaban las paredes, un golpe era sí, dos no, por ejemplo. Tenían todo un lenguaje con ellos’”, agregó De Brito.
La revelación de estas prácticas ha desatado una fuerte polémica sobre la transparencia y la ética en el programa, generando un intenso debate en las redes sociales y entre los seguidores del reality. A medida que la controversia se intensifica, queda claro que el futuro de “Gran Hermano” está más en tela de juicio que nunca.