A veces cuando estamos ante ciertas circunstancias y la “madre naturaleza llama” no queda otra que hacerle caso e ir directo a cumplir con el cometido. Sin embargo, hay situaciones como en Gran Hermano que te pone a prueba y puede llegar a suceder que ocurran accidentes, como en el caso de Furia.
En la casa de Gran Hermano 2023 (Telefe), Juliana “Furia” Scaglione protagonizó un insólito episodio durante la prueba del líder, en la que los concursantes competían por una vivienda prefabricada. La tarea consistía en permanecer atados a la casa mediante una soga en la muñeca durante varias horas. Sin embargo, en un momento crítico, Juliana no pudo contenerse y terminó orinándose.
El incidente ocurrió cuando Juliana se escondió detrás de la casa y advirtió a sus compañeros: “No vengan. Marqué territorio“. Alarmados, los jugadores le preguntaron si estaba haciendo pis:“¿Estás haciendo pis?“, a lo que ella respondió que no pudo aguantar más la situación: “No aguantó la cosa esta”. Explicó que la producción le había proporcionado un pañal en el suelo para tales eventualidades.
“Me estaba meando, boludo. Gran Hermano no me retó“, afirmó Juliana, evidenciando su incomodidad. Bautista Mascia, al ver la situación, expresó su disgusto: “¡Me measte la media, boluda!“. Ante esto, Juliana mencionó que estaba aliviada por tener tatuajes que ocultaban la mancha y se preguntó donde tirar el pañal: “No me vean la pochola. Menos mal que estoy tatuada… Bueno, estoy como nueva. ¿A dónde tiro esto ahora?.
Finalmente, Juliana optó por orinar dentro de una botella para evitar ensuciar aún más el suelo debido a que el pañal que les habían dado, no soportó: “Yo no quería mear el piso, pensé que eso aguantaba. Pero rebalsó”. Este momento se viralizó en las redes sociales, generando diversas reacciones entre los televidentes. Mientras algunos manifestaron su repulsión ante lo sucedido, otros elogiaron la determinación de Juliana por continuar con la prueba a pesar de las circunstancias adversas.
El episodio reflejó la intensidad y la variedad de situaciones que pueden surgir en la convivencia dentro de la casa de Gran Hermano, así como la capacidad de los concursantes para adaptarse y superar desafíos inesperados. A pesar del incómodo incidente, Juliana demostró su compromiso con la competencia y su determinación para alcanzar sus objetivos en el programa.