Cuando parecía que nada más podía sorprender en la última etapa de Gran Hermano 2024, Santiago del Moro volvió a sacudir el tablero con un anuncio que promete modificar por completo la dinámica de la casa en sus días decisivos. Con sus palabras, el conductor encendió las expectativas y confirmó el regreso de varios ex participantes que tendrán una misión especial.
Ex hermanitos de vuelta… pero no para competir
Todo ocurrió al cierre de una de las últimas emisiones del programa, justo después de la boda entre Brian y Florencia dentro de la casa. Del Moro, en tono enigmático, dejó caer una bomba que generó revuelo: “Ya entramos a la recta final y faltaron varios hoy entrar a la casa”, dijo mientras miraba a cámara. Y luego, sin filtro, soltó lo que muchos estaban esperando: “Algunos, no sé cuántos, los que no están hoy, van a entrar en la recta final a jugar”.
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La panelista Marina Calabró no se quedó callada y enseguida le preguntó con sorpresa: “¿Pero con chances?”, en alusión a si podían volver a competir por el premio. Pero Del Moro fue claro: “No, entran a acompañar. Entran a hacer campaña en la recta final con los últimos que queden”. Para cerrar el momento con suspenso, agregó: “Ya se van a enterar de quiénes entran”.
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Con estas palabras, se confirmó lo que muchos fanáticos intuían: varios de los ex participantes más queridos de esta edición volverán a ingresar a la casa, no para jugar directamente, sino para acompañar y apoyar a los finalistas en sus últimos días. Entre los nombres que ya están confirmados están Chiara, quien probablemente ingrese para acompañar a su amigo Ulises, y también Petrona, Luciana, Martina, Nano, Jeni, Andrea y Bati.
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Este movimiento le dará un giro interesante a la convivencia, ya que los últimos jugadores tendrán que convivir con ex compañeros que arrastran historias, vínculos y tensiones sin resolver. Y todo eso, justo en el tramo más crucial del reality.
Una vez más, Gran Hermano demuestra por qué sigue siendo uno de los programas más impredecibles y comentados del país. La emoción está lejos de terminar, y la casa todavía tiene mucho por contar.