En la televisión argentina abundan los momentos emotivos, pero cada tanto surge uno que deja al público en silencio. Eso ocurrió recientemente en La Mañana con Moria, el ciclo de Moria Casán por la pantalla de El Trece, cuando Aníbal Pachano volvió a demostrar por qué su historia de vida inspira a tantas personas. Con una mezcla de sinceridad, crudeza y una fortaleza admirable, el artista abrió su corazón en medio de una etapa profundamente desafiante, marcada por su salud y por el embarazo de su hija, Sofía.
En el estudio, Pachano no esquivó ningún tema y confirmó el doloroso diagnóstico con una claridad que impactó a todos. “Tengo cáncer en el pulmón, pero se disparó metástasis en el cerebro, en el hígado y en la suprarrenal derecha. Pero estoy con quimioterapia, haciendo el tratamiento”, expresó, con una entereza que emocionó tanto a Moria como a los televidentes.
Un relato honesto en un momento clave de su vida
Mientras hablaba, el reconocido bailarín y coreógrafo dejó en evidencia que su batalla no es solo física, sino también emocional. Por eso remarcó la importancia de trabajar internamente para sobrellevar este presente tan complejo. “Creo que lo principal es calmarse, sacarse el enojo y la bronca. Yo estaba como muy caracúlico y hoy estoy más tranquilo, ocupándome de mí y no de los demás y priorizándome”, confió, mostrando un costado muy íntimo.
También contó cómo vivió una de las sesiones más difíciles del tratamiento. “En la segunda quimio me pasó que me desestabilicé un poco, pero no me asusté. Simplemente me ocupé de que todos los médicos me atendieran bien, que todo estuviera en orden”, relató con firmeza. Y, aunque reveló que a veces lo acompañan amigos, fue muy claro al remarcar: “A veces algún amigo me acompaña, pero no es que yo los llamo para eso”.
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El artista, que desde hace años comparte su lucha de manera pública, también destacó la importancia del acompañamiento emocional. «También estoy haciendo terapia y eso me ayuda un montón», dijo. Y con la misma honestidad agregó: “Yo soy caracúlico y muchas veces con situaciones me enojaba muy al pedo”.
La charla se volvió aún más íntima cuando Moria, visiblemente conmovida, no pudo evitar expresar su cariño: “Me dan ganas de abrazarte”, le dijo la One, cerrando un momento que quedará grabado en la memoria del programa.
