“Todos fallutos”: Beto Casella habló de su pasado y reveló las fuertes diferencias con su padre

Beto Casella es la figura principal de El Nueve y una de las estrellas destacadas de la televisión. Aunque lleva más de 30 años en el medio, recientemente decidió revelar al público algo desconocido sobre su pasado.

La sorprendente revelación tuvo lugar esta semana durante el clásico pase de Rock&Pop, justo antes de comenzar su programa Nadie nos para. Durante la conversación sobre los días consecutivos de lluvia y los efectos de la tormenta supercelda en Buenos Aires, el presentador dejó a todos en la emisora atónitos con su relato inesperado.

“Mi primer trabajo fue en una fábrica de paraguas”, compartió Beto, añadiendo: “Entre otras cosas yo les ponía el mango. Duré dos años porque terminé el primario y dejé la escuela. Mis viejos siempre nos dieron mucha libertad”.

“Estudiás o trabajás. Después me di cuenta que sin estudio en la vida… Así que volví al colegio”, explicó Casella. En medio de sus recuerdos, el conductor de Bendita reveló: “Mi viejo quería que fuera acordeonista y peluquero”.

“Me llevaba a aprender acordeón, que me pesaba. Le dije que eso sí, pero peluquero no“, continuó. “Me fui de la fábrica de paraguas porque pedí aumento y el dueño no tenía un mango. Los peluqueros son todos fallutos porque hablan de atrás”, expresó Beto sobre las razones por las que abandonó distintos trabajos.

Aunque años después estudió periodismo y trabajó en varios medios impresos antes de iniciar su carrera en televisión como productor de Susana Giménez, Beto compartió con sus colegas los otros empleos que tuvo antes de alcanzar el éxito en la TV: fue vendedor de libros y material educativo en escuelas, dirigió un negocio de indumentaria de cuero y un videoclub en El Palomar, su ciudad natal.

Es fundamental tener claridad respecto a nuestros sueños y metas en la vida, ya que no siempre coincidirán con las expectativas de nuestros padres o de quienes nos rodean. El caso de Beto Casella ejemplifica cómo es necesario explorar y descubrir qué nos hace realmente felices y nos motiva, incluso si eso implica alejarse de lo que otros desean para nosotros. La búsqueda de la realización personal y profesional es un camino individual y único, donde es vital seguir nuestras propias pasiones y deseos para construir una vida plena y satisfactoria.