La reciente denuncia por corrupción de menores contra el conductor de Telefe, Alejandro “Marley” Wiebe, ha conmocionado a la industria del entretenimiento en Argentina. La acusación, realizada por Adrián Alfredo Molina, de 45 años, quien asegura haber mantenido una relación con Marley cuando tenía solo 17 años, ha generado una gran polémica en los medios y en el público. En medio de este escándalo, muchas figuras del espectáculo han optado por el silencio, mientras que otras, como Santiago del Moro, también conductor de Telefe, han decidido hablar sobre el tema.
Durante una entrevista, Del Moro fue consultado acerca de cómo le había afectado la denuncia contra su colega. El conductor de Gran Hermano, aunque conocido por su reserva en asuntos polémicos, expresó su opinión con sinceridad. “No me contacté con él porque prácticamente no lo conozco. Las mismas inquietudes que tienen ustedes son las que tengo yo. No te puedo sumar nada a lo que ya hemos visto todos”, explicó, mostrando cautela al abordar un tema tan delicado.
Sin embargo, Del Moro no evitó reflexionar sobre la naturaleza de este tipo de denuncias, recordando un caso anterior que involucró al también conductor de Telefe, Jey Mammon. “Le quiero sacar el nombre propio, soy una persona muy tajante con ese tipo de casos. Son temas muy sensibles y lo que pedimos todos es justicia; siempre que se sepa la verdad, para ambas partes”, declaró con firmeza.
Esta declaración refleja la postura del conductor sobre situaciones tan serias como la que enfrenta Marley, destacando la importancia de que se haga justicia de manera imparcial. La referencia a la búsqueda de verdad tanto para la persona acusada como para la víctima resalta su enfoque equilibrado, en un momento en el que muchos prefieren evitar el tema o tomar partido abiertamente.
El caso de Marley sigue en curso, y mientras tanto, sus colegas y el público esperan ansiosos que la justicia determine el desenlace de esta controversia que ha sacudido al mundo del espectáculo argentino.
Tristeza por la difícil situación económica que atraviesa Juan de Gran Hermano: “Tuve que vender…”
Sin embargo, Reverdito también adelantó que está explorando otras alternativas para mejorar su situación. “Estoy viendo de irme al campo a laburar, seguramente me vaya a trabajar con mi suegro, estoy analizando eso,” comentó, mostrando su disposición a adaptarse a nuevos entornos laborales en busca de mejores oportunidades.
El ex Gran Hermano también habló sobre las diferencias entre la vida dentro del reality y el regreso a la realidad cotidiana. “Te cuesta muchísimo ganar el mango en la calle. Quizás hacías una publicidad y era mucha plata en comparación a lo que uno gana en el día a día con un laburo normal,” reflexionó, destacando la enorme brecha entre la fama temporal que otorga la televisión y las dificultades que enfrentan muchas personas al volver a la vida real.
Reverdito, a pesar de las adversidades, sigue luchando por salir adelante, buscando nuevas oportunidades y adaptándose a los cambios que la vida le presenta. Su historia es un recordatorio de las complicaciones económicas y emocionales que pueden afectar a cualquiera, incluso a aquellos que, por un momento, estuvieron bajo los reflectores de la fama.