Si bien Jorge Rial ya no está al frente de programas de chimentos como en sus tiempos de Intrusos, eso no significa que haya dejado de manejar información sensible del mundo del espectáculo. Más bien todo lo contrario: el periodista sigue sorprendiendo con revelaciones que sacuden a la farándula. Y esta vez, lo hizo con una de las historias de infidelidad más potentes que se hayan contado en los últimos tiempos.
En un formato que domina como pocos —el enigmático tuit cargado de suspenso—, Rial activó la curiosidad de miles con una secuencia de publicaciones que, como él mismo dice, salieron de “la máquina de sacar títulos”. Y lo que reveló es sencillamente impactante: un famoso descubrió que su pareja le era infiel y todo se desató en un contexto inédito.
Según contó el propio Rial, “El quilombo de la infidelidad lo sorprendió al aire pero no en la intimidad”. Es decir, aunque el protagonista ya tenía sospechas, la confirmación definitiva ocurrió en plena transmisión. Y lo que vino después fue todavía más explosivo.
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El conductor detalló que “Hace un tiempo que venía desconfiando de ella”, lo que ya muestra que no era una relación totalmente sólida. Pero el golpe definitivo llegó cuando el famoso halló un paquete muy comprometedor en las pertenencias de su pareja: “Exactamente desde que le encontró 40.000 dólares en una caja que nunca pudo explicar su origen. Ahí se cortaron los viajes”.
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Así como lo leés: una suma enorme de dinero, sin explicación clara, fue la señal definitiva de que algo no andaba bien. El hallazgo de esos 40 mil dólares fue el quiebre. A partir de ese momento, no solo terminaron las escapadas juntos, sino que comenzó una investigación personal que derivó en la revelación más temida: la infidelidad.
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En redes sociales, muchos usuarios empezaron a vincular la historia con Lourdes Sánchez y el Chato Prada, alimentando especulaciones por viejos rumores. Sin embargo, la realidad es que el ex conductor de Intrusos prefirió mantener el misterio y, fiel a su estilo, no dio nombres ni pistas concretas.
Rial no dio nombres, como es costumbre en sus publicaciones más intrigantes, pero la magnitud del escándalo sugiere que se trata de una figura muy conocida. Lo cierto es que, aunque ya no se especializa en el mundo del espectáculo, sigue teniendo acceso privilegiado a información que deja sin aliento a todos.
