Cuando parecía que el escándalo entre Yanina Latorre y Fernanda Iglesias ya no podía escalar más, apareció una inesperada protagonista: la mamá de Yanina, Dora Caamaño, quien irrumpió con una serie de mensajes lapidarios dirigidos a la periodista, dejando al descubierto una defensa feroz y sin filtros hacia su hija. Lo que empezó como una chicana mediática, ahora involucra a toda la familia.
El conflicto se encendió cuando Fernanda Iglesias, desde sus redes, lanzó un mensaje enigmático dando a entender que Diego Latorre habría tenido una infidelidad. Enseguida, las indirectas se transformaron en acusaciones más directas, con Iglesias asegurando que el propio Diego la llamó para pedirle que no siguiera hablando del tema.
En medio de este vendaval, Yanina Latorre reaccionó desde su programa Sálvese Quien Pueda, en América TV, con un descargo cargado de furia, defendiendo a su marido y desmintiendo categóricamente las insinuaciones. Pero la verdadera sorpresa llegó cuando su madre se sumó a la batalla, dispuesta a decir lo que muchos callan.
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Dora Caamaño le escribió a Iglesias por redes sociales, y lejos de medir sus palabras, le dedicó frases que desbordaron indignación y desprecio. La periodista, lejos de ignorar los mensajes, decidió exponerlos públicamente durante su participación en Puro Show (El Trece).
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Las palabras de Dora no dejaron lugar a dudas sobre su postura. “Inútil”, “sola como un perro” y “viajás en colectivo”, “Estás sola como un perro”, fueron algunas de las expresiones más polémicas que le dedicó. También hizo alusión a su situación familiar con el padre de su hijo menor: “Estás esperando que Nieto, tu víctima, te traiga un paquete de arroz”. Y presumió la lujosa vida de Yanina Latorre: “Sábes la vida que tiene mi hija?”
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Por el momento, Fernanda Iglesias no parece tener intención alguna de ponerle fin a esta guerra mediática, y mientras el conflicto siga alimentándose con nuevas intervenciones, todo indica que esta historia aún tiene varios capítulos por delante.
Lo cierto es que este nuevo cruce confirma una vez más que la farándula argentina no conoce límites cuando se trata de escándalos personales. Y si algo quedó claro, es que cuando se meten con Yanina, su mamá no se queda callada.
