A lo largo de su extensa carrera, Marta González se ganó un lugar indiscutido en el corazón del público argentino. Protagonista de recordadas ficciones, la actriz supo conquistar con su talento, su carisma y su compromiso con el arte. Hoy, lejos de los personajes de ficción, la realidad la pone nuevamente frente a una dura batalla: un nuevo cáncer que enfrenta con la misma fuerza con la que construyó su trayectoria.
Con una entereza que conmovió a todos, Marta reapareció en el programa Puro Show, conducido por Pampito y Matías Vázquez, y habló desde el alma sobre el difícil momento que atraviesa. Sin perder la sonrisa ni su fe, confesó: “Esta es la cuarta quimio que me hago en mi vida”, una frase que refleja no solo el desafío que enfrenta, sino también su inquebrantable voluntad de seguir adelante.
La actriz contó que actualmente recibe quimioterapia inyectable y explicó con total sinceridad: “Esta es la cuarta quimio que me hago en mi vida. Pero esta pasó de grado, es un cáncer secundario. Cuando es secundario, quiere decir que tengo metástasis. Están tratando de pararme la metástasis y yo pongo mi cuerpito y mis ganas”, expresó, dejando en claro que sigue dando pelea con optimismo y coraje.
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A pesar del tratamiento, Marta continúa trabajando en el teatro, algo que —según contó— le da energía para seguir adelante. “A veces digo ‘estoy loca, ¿cómo voy a hacer una gira?’ Pero la obra es preciosa, por eso me entusiasmó la idea de trabajar con el Tano”, relató, destacando que al principio se negó varias veces a aceptar el proyecto, pero finalmente dijo que sí por amor al arte y a sus compañeros.
Visiblemente emocionada, la actriz recordó los días previos a comenzar los ensayos y reveló el temor que sintió: “Antes de empezar a ensayar, todos los días pensaba ‘¿será hoy?, ¿me moriré hoy?’”, confesó. Sin embargo, lejos de rendirse, reafirmó su espíritu de lucha: “Hace 24 años que lo estoy peleando y le estoy ganando”.
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Con gran sabiduría, González reflexionó sobre cómo enfrenta la enfermedad: “Hay dos formas: o te entregás o luchás. No hay otra. Y a mí no me gusta entregarme. Me hace feliz mi casa, ver las luces de los edificios, ir al teatro, ver a mis compañeros haciendo un buen trabajo. Eso me da vida”, dijo, recibiendo un profundo aplauso.
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Además, habló con ternura del recuerdo de su hijo, quien sigue siendo una fuente de fortaleza para ella. “Mi hijo sigue vivo en mí, sigue vivo en todos los que me lo recuerdan. Eso es estar vivo”, expresó conmovida.
Con su testimonio, Marta González volvió a inspirar al público con su entereza y amor por la vida. A pesar de los golpes y las adversidades, la artista demuestra que la verdadera fuerza está en no rendirse y en seguir disfrutando cada instante.
