Juliana “Furia” Scaglione se encuentra nuevamente en el ojo de la tormenta dentro de la casa de Gran Hermano. Sus recientes actitudes y comportamientos han generado un intenso debate fuera del programa sobre si debe ser expulsada o no.
El conflicto más reciente comenzó cuando Furia insultó a sus ex compañeros durante su reingreso a la casa para nominar. Este comportamiento no pasó desapercibido para la producción del programa, que le hizo una firme advertencia por su conducta inapropiada.
En las últimas horas, se viralizó en redes sociales un momento en el que Furia reveló, en una conversación privada en la habitación, que la producción le había hecho un contundente pedido. Claramente en desacuerdo, Juliana comentó a Nicolás Grosman y Emmanuel Vich: “Es un montón lo que me están pidiendo, que no diga malas palabras”. Nicolás, sorprendido, le preguntó: “¿De vuelta te lo dijeron?“, dando a entender que este no es el primer llamado de atención que Furia ha recibido en el confesionario.
JULIANA AL 9009 dijo en más de una oportunidad que le piden que se calme, que trate bien a la gente y que no diga malas palabras
A pesar de este intento fallido por parte de la producción, dicha jugadora sigue derrapando cada día más pic.twitter.com/wJiNpqvyLm
— TRONK (@TronkOficial) June 6, 2024
La situación se intensificó cuando Furia, conversando con Darío y Bautista, mencionó que sabía que había panelistas que la criticaban. En un momento de frustración, expresó: “El panelista es el único que puede juzgar nuestro juego, tiene que ser astuto de no escuchar tonterías de gente eliminada o tergiversar información o andar diciendo cosas que no son de mí, que me dicen que soy violenta cuando no lo soy”.
JULIANA: “El PANELISTA es el único que puede juzgar nuestro juego, tiene que ser ASTUTO de no escuchar pelotudeces de gente eliminada o tergiversar información o ANDAR DICIENDO COSAS QUE NO SON DE MI, QUE ME DICEN QUE SOY VIOLENTA cuando no lo soy”
*cambian cam*#GranHermano pic.twitter.com/xPjxkonyPP
— TRONK (@TronkOficial) June 6, 2024
La tensión dentro de la casa es palpable, y la decisión de la producción podría ser determinante para el futuro de Furia en el reality. Con las advertencias acumulándose y su comportamiento bajo constante escrutinio, el destino de Juliana Scaglione en Gran Hermano está más incierto que nunca.
