Este fin de semana, Florencia Regidor, ex participante de Gran Hermano, sorprendió a todos al confirmar su separación de Nicolás Grosman, a quien conoció en el reality de Telefe. La noticia no solo generó revuelo por tratarse de una pareja que había nacido en el programa, sino porque Florencia acusó a Nicolás de infidelidad, señalando una tercera en discordia.
“Quiero dirigirme a ustedes para dar la cara después de recibir todo tipo de agresiones hacia mí y a mi familia, y de pasarla muy mal. Lo que pasó con Nicolás fue en un contexto de dos personas solteras que se respetan mucho y no pasó a mayores.”
Lucía continuó su descargo, pidiendo respeto y comprensión por parte de quienes han estado siguiendo el caso:
“Dejen de mentirle a la gente con confusiones y mentiras que no hacen más que lastimar. Les pido mis más sinceras disculpas si en algún momento ofendí a alguien. Les ruego respeto y comprensión. Muchas gracias a todos. Los quiero.”
Finalmente, cerró su comunicado reiterando un mensaje de empatía para todas las partes involucradas:
“Respeto y comprensión para todos los involucrados.”
El escándalo sigue dando que hablar, pero tanto Nicolás como Lucía han dejado en claro que la situación no fue más allá de un malentendido entre personas solteras. Queda por ver cómo avanzará este caso en los próximos días, especialmente tras las fuertes acusaciones de Florencia, quien se ha mostrado dolida por lo sucedido.
Flor Regidor lanzó otro comunicado contra Nicolás Grosman:
“No solo se escapa, sino que expone chats privados, cuando yo traté de ni dar nombres y expresarme de la forma más respetuosa. Nada más triste que la decepción. Porque es eso, no estoy enojada, estoy decepcionada. Desde el jueves a la tarde, yo estando en Bariloche, empecé a notar y la gente me contaba situaciones en las que claramente se notaba algo entre ellos.
Por eso, yo, llorando, le puse todos esos mensajes porque realmente no daba más. Me dijo que cuando llegara a Uruguay íbamos a hablar. Claramente, en Uruguay, como se vio en redes, me recibió como si nada, me besó como si nada y me dijo que me amaba como si nada. Todo una mentira.
No solo una mentira, sino una falta de respeto. Tuve que soportar que se rieran de mí, contándose lo que había pasado en la misma mesa en la que estábamos todos cenando.
Yo siempre pedí sinceridad y siempre di lugar a que me fuera sincero. Me dijo que no supo manejar las cosas, yo lo entendí y valoré que me lo haya admitido. Respeté y tomé su perdón, pero sin intentar seguir apostando a una relación donde la confianza está perdida.”