La salud de Fernanda Iglesias, panelista de LAM, ha generado preocupación después de que experimentara un episodio alarmante poco antes de salir al aire. Mientras Yanina Latorre se encontraba de vacaciones en Wembley, Inglaterra, para la Champions League, otra de las “angelitas” se ausentó debido a problemas de salud.
Momentos antes de que comenzara el programa, tuvo que abandonar su puesto debido a un súbito malestar. La panelista relató que comenzó a sentir un dolor intenso en el pecho que se extendió hasta la mandíbula, describiendo la experiencia como aterradora. “Estaba prolijita esperando que empezara el programa y, de repente, me agarró un dolor en todo el pecho. Me subió hasta la mandíbula. Pensaba que ahí la quedaba. He tenido antes ataques de pánico, pero en esos momentos estaba mal, no la estaba pasando bien, pero este fue instantáneo”, expresó Fernanda.
La gravedad del dolor llevó a Fernanda a buscar atención médica inmediata. “Vino el SAME y me tomó la presión. Estaba asustada y con el maquillaje no se notaba que estaba pálida. Me tomaron el oxígeno y la presión, que estaba un poco alta. El oxímetro me dio bien”, detalló la panelista, resaltando la rapidez con la que los médicos actuaron.
Para asegurarse de que no hubiera problemas cardíacos, Fernanda llamó a la ambulancia de su prepaga, que llegó equipada con un electrocardiograma. “Llamé a la ambulancia de la prepaga, que venían con el electrocardiograma. El electrocardiograma salió bien”, añadió, mostrando cierto alivio al saber que sus signos vitales eran normales.
Fernanda Iglesias explicó por qué se descompensó y el horror que vivió: “El dolor me subió hasta el cuello” pic.twitter.com/dFAZCfoia1
— Revista PRONTO (@Revista_PRONTO) May 30, 2024
Este incidente ha generado gran preocupación entre los seguidores del programa y sus compañeros de panel, quienes esperan su pronta recuperación. La rápida intervención de los profesionales de la salud ayudó a tranquilizar la situación, aunque Fernanda tuvo que mantenerse en reposo por recomendación médica.
