El mundo de la música tropical está de luto por el fallecimiento de Lía Crucet, la indiscutible reina de la bailanta, quien dejó un legado imborrable en los escenarios argentinos. La artista, conocida por su carisma y talento, falleció a los 72 años tras luchar contra un cáncer bronco pulmonar que deterioró su salud en los últimos meses. Su partida deja un vacío enorme en el corazón de sus seguidores y colegas del medio artístico.
Una vida dedicada al espectáculo
La noticia de su muerte fue confirmada por su hija Karina, quien expresó a TN Show: “Mi mamá falleció hoy en el hospital de Mar del Plata, donde estaba internada”. Desde principios de 2022, Lía Crucet enfrentó varias intervenciones médicas debido a sus enfermedades preexistentes, pero siempre demostró una fuerza admirable. Sin embargo, durante la segunda mitad de 2024, su estado de salud se deterioró significativamente hasta que su cuerpo no pudo resistir más.
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Crucet comenzó su carrera en el mundo del teatro y la televisión, compartiendo escenario con grandes figuras como Nito Artaza, Moria Casán, Tristán, Patricia Dal, Jorge Porcel, Jorge Corona, José Marrone y Alberto Olmedo. Su talento y versatilidad la llevaron a probar suerte en el cine antes de incursionar en la música tropical, donde encontró su verdadera vocación. Su firma con Leader Music fue el punto de partida de una carrera que la consagró como un ícono de la bailanta.
La artista será recordada no solo por su innegable legado musical, sino también por su energía y pasión que contagió a miles de fanáticos. El mundo del espectáculo la despide con profundo dolor, pero su espíritu vivirá eternamente en cada melodía que dejó como herencia.
