El periodista Jorge Lanata, de 64 años, atraviesa un delicado momento de salud, luego de haber sido sometido a cuatro cirugías en un corto periodo. En medio de esta situación, la familia del periodista se enfrenta a un nuevo escándalo: la filtración de una foto de Lanata desde su internación, lo que ha generado indignación y malestar entre sus seres queridos.
.
La primera en expresar su descontento fue Elba Marcovecchio, su esposa, quien mostró su enojo ante la situación. “Es un horror, es lo que traté de evitar todo el tiempo”, declaró Marcovecchio, haciendo referencia a los esfuerzos que había hecho para proteger la intimidad de su marido. Tanto ella como las hijas de Lanata, Bárbara y Lola, se habían asegurado de que nadie cercano al periodista —ni enfermeras, ni médicos— difundiera material relacionado con su internación.
Sin embargo, a pesar de las precauciones, la foto de Jorge Lanata internado llegó a las redes sociales. Tras una investigación que la familia inició, se descubrió que la imagen fue publicada en una cuenta de X (ex Twitter), creada en octubre de este año y sin seguidores, lo que facilita la identificación del responsable. Lola y Bárbara, profundamente afectadas por esta invasión a la privacidad, ya están moviéndose para tomar acciones legales contra la persona detrás de esta cuenta.
En el programa DDM, se brindaron más detalles sobre la situación. “Me comentaron que recibieron la foto gracias a que nosotros la difundimos. Nos dijeron que no sabían nada y no sabían quién fue. Pero, desde el análisis que hicieron, dijeron que la cuenta se había creado en octubre de 2024 y no tiene seguidores”, revelaron.
A pesar de esta dolorosa situación, una buena noticia alivia a la familia: Jorge Lanata se encuentra estable. De acuerdo con información compartida en A la Tarde, “su intestino está funcionando, al punto que decidieron bajarle la sedación. Además de la sedación, respira por sus propios medios, por momentos sigue siendo asistido. Está despierto, pero todavía no focaliza ni puede hablar porque no le ponen la válvula fonatoria”. Estas palabras dan esperanza a quienes siguen de cerca la evolución del periodista, mientras su familia lucha por preservar su privacidad en un momento tan crítico.
.
La filtración de la foto no solo ha generado una gran indignación en el entorno de Lanata, sino que también deja en evidencia las dificultades de mantener la privacidad en tiempos de redes sociales, incluso en situaciones tan sensibles como esta.